Arenoso: Suckers 330/365 #project365 #noviembre #november #2018 Y de nuevo hay días que no sabes cómo catalogar. Este comenzó tranquilo, con la visita del laboratorio en preparación para la cita de chequeo mañana. Durmió bien, casi ni tosió. Todo en orden, ¿verdad? Pues a las 6 y pico, mientras estaba en la oficina revisando un contrato durante lo que entendía iba a ser una larga noche productiva, me llama su nana para decirme que se estaba sintiendo mal, que estaba sofocada, básicamente que se estaba ahogando. Pleno tapón, salgo como una loca mientras Waze me dice que el trayecto a casa me tomaría cerca de 30 minutos (fabuloso tráfico de navidad en noviembre), comienzo a partir brazos en la calle y llego en menos de 10 minutos. Todo el mundo y su tía me llamó y escribió mientras manejaba. La presión me subió tanto que todavía me duele la cabeza. Por fin llego. Hay que subir calmada para no alterarla, darle tranquilidad. Oxigenación bien, presión bien. Un ataque de tos, mucha flema que quería salir del cuerpo, como debe ser, y una dosis fuerte de nervios. La noche productiva se fue para la porra. Ahora es que estoy retomando la computadora para seguir trabajando. *sigh*